Por Agustina Cecilia Suite
Nacido en la Provincia de Buenos Aires, el artista Fonso fue telonero de bandas como Jungle y Pulp. Su versatilidad y creatividad en la música lo destacan en la escena independiente. A principios de mayo presentará su último disco en Niceto Club.
El historiador y curador argentino Ricardo Watson cuenta, en una entrevista realizada a fines del 2023, sobre la relación de los 40 años de democracia en Argentina con los 40 años del rock nacional. Watson recuerda el aumento del sentimiento nacionalista, el cual alegró al público a través de la música. A partir de los 80, el rock nacional se formó como una nueva identidad, o como una “banda de sonido” propia del país. Este género, liderado por grandes como Charly García, Spinetta y Litto Nebbia, empezó a pisar fuerte: letras metafóricas, música de los jóvenes.
Así como la historia del rock en Argentina supo tener su época dorada, en las últimas décadas con los cambios de paradigmas y con los nuevos géneros musicales, la creación de música dentro del rock nacional se redujo. Con el nuevo renacer del under post-pandemia, la música independiente se hizo paso nuevamente entre los jóvenes. Uno de ellos, Lucas Difonzo (o simplemente Fonso), se encargó de reivindicar el rock en el país. Fue telonero de varios recitales de artistas internacionales, entre ellos la banda inglesa Pulp, que se presentó en el país en noviembre pasado.
A fines de 2023, y con una estética muy política y casi partidista, Fonso y las Paritarias presentan Día del Trabajador, el último disco del proyecto musical del artista. Ahora se encuentran en plena gira bonaerense, pero se preparan para su debut en Capital Federal. Con un nombre de álbum tan elocuente, no podía ser otra la fecha de presentación del mismo que el primero de mayo, en el mítico Niceto Club.
Día del Trabajador trae grabadas 10 canciones, de las cuales “Eso no es Amor”, “No Me Afecta” y “Motín” ya son hits de la escena independiente. Junto al productor Leandro Lopatín, Fonso se largó a experimentar con nuevos sonidos. Además, invitando a distintos artistas de la escena como Marilina Bertoldi, Mariano Di Cesare o Daniel Melingo, generó un espacio fructífero para que sus canciones se adaptaran a una estética más rockera.
“Rompiendo las vidrieras de la nueva estación/ Gritando en la cocina, escupiendo en el balcón/ Quiero respirar un poco/ Salir del confort”, entona el cantante argentino en “Salir del Confort”. Mientras tanto, los fans le escriben en redes sociales que entienden su cambio de paradigma: se encuentra experimentando con su sonido. Ahora no se escuchan samples, sino la compañía de las guitarras y una voz áspera. Es que en sus inicios, el cantante oriundo de Castelar, tenía una estética más electrónica, un género adoptado en su paso por la capital alemana.
En este trabajo, Fonso en conjunto con el productor lograron crear un disco lleno de guiños a los grandes músicos del género. Si bien cuando estaba empezando a recorrer sus veintitantos, su segundo álbum Some Plays fue considerado por la crítica independiente como una de sus mejores creaciones, Día del Trabajador no se queda atrás. Es un disco novedoso y de rock nacional. En el tercer tema que entona con “El Príncipe Idiota” (Mariano Di Cesare), toca notas más cerca del indie pop, con una melodía más romántica y dulce hasta que lo irrumpe una sonoridad más estridente “a lo Charly”. “Siempre el mismo tema en la tele/ Ya no lo quiero escuchar”, se lo escucha cantar. Otro caso similar ocurre en “Entre las Paredes”, en donde se puede diferenciar a un Fonso rockero.
Así como Watson mencionaba que las políticas de la época hicieron que el rock tomara una identidad nacional y propia del país, a Fonso este disco le llegó en un momento político de cambios e incertidumbres. Aún lleno de guiños a los grandes del rock argentino, el cantante presenta su última creación con esencia propia. Quizás escuchar música del under, de los jóvenes y de Fonso sea la solución a nuestros problemas.
Imágenes: Instagram del artista
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